El juez Trece Penal Municipal con funciones de control de Garantías ordenó la encarcelación intramural del fiscal especializado Javier Rodríguez y el técnico investigador del CTI Jairo Pulido, quienes estarían involucrados en el cobro de grandes sumas de dinero para interceder en actuaciones judiciales.
Para la juez Maiby Lissette González, los dos funcionarios judiciales representan un peligro para la investigación y el proceso penal, razón por la cual les impuso medida restrictiva de la libertad en centro carcelario.
Las investigaciones en contra de los funcionarios iniciaron hace poco más de dos meses, cuando José Fernando Malaver Fuentes denunció ante la propia Fiscalía que estaba siendo extorsionado por el par de funcionarios judiciales, a cambio de “arreglar” a su favor el proceso que se adelanta en su contra.
El pasado viernes a las 7:00 de la noche, Javier Rodríguez y Jairo Pulido fueron capturados en flagrancia después de haber recibido $110 millones de la extorsión. La Fiscalía les imputó el delito de concusión. Los funcionarios negaron los cargos.
La captura se dio luego de que el afectado a través de un bolígrafo con un micrófono, lograra grabar el momento en que los imputados le exigían la millonaria suma de dinero, para frenar investigaciones penales.
Cuando tomaban una cerveza y se alistaban para contar $110 millones en un bar en Bucaramanga, fueron detenidos el fiscal especializado Rodríguez y el funcionario del CTI.
El dinero, presuntamente, sería el anticipo de $350 millones que recibirían los dos funcionarios, para no vincular a un empresario a una investigación por lavado de activos.
Aunque la defensa de Javier Rodríguez y Jairo Pulido, así como la Procuraduría, habían solicitado que los dos sindicados fueran enviados a una prisión militar, ya que según ellos ser funcionarios judiciales representa un peligro para su integridad e incluso su vida en un centro penitenciario regular, la juez no accedió a dicha solicitud.