Corrupción en las Fuerzas Armadas: Cuando los coroneles alquilan al Ejército como si fuera suyo
El coronel Fredy Quesada, comandante del Batallón de Ingenieros de Pasto, ha sido capturado por la Fiscalía Penal y Militar. Su delito: alquilar la maquinaria del Ejército como si fuera su negocio personal. Por la módica suma de 50 millones de pesos, este «honorable» oficial facilitó maquinaria estatal para fines privados, según las investigaciones. Y así, otra vez, la corrupción demuestra que en Colombia ni el Ejército está a salvo.
Un coronel a la venta: El negocio personal de Quesada
El coronel Fredy Quesada, en su pequeño reino de Nariño, decidió que el equipo militar asignado a su batallón era de su propiedad. ¿Qué mejor manera de usar la maquinaria del Estado que alquilarla para obras privadas en Ipiales? ¿Y quién necesita autorización de los superiores cuando se puede embolsillar una buena suma? Corrupción militar en su máxima expresión.
Corrupción en las alturas: Cuando los mandos militares olvidan su misión
El caso de Quesada no es aislado. Junto a él, fueron detenidos otros cinco miembros del Ejército, involucrados en una red de corrupción que abarca desde el tráfico de maquinaria hasta el manejo irregular de material de guerra. Es evidente que algunos oficiales creen que el Ejército es una empresa privada y que su misión es llenar sus bolsillos, no proteger a los ciudadanos.
La Fiscalía y el Ministerio de Defensa, ¿luchando por la transparencia?
Mientras la Fiscalía Penal Militar y el Ministerio de Defensa se declaran víctimas y aseguran que actuarán con firmeza, la realidad es que la corrupción sigue minando la confianza en las instituciones. ¿Realmente podemos esperar justicia cuando los responsables de garantizarla son los mismos que se benefician del sistema?
¿Qué más tiene que pasar para que la corrupción militar sea tomada en serio?
Este escándalo es solo uno más en una larga lista de casos que revelan cómo los altos mandos del Ejército usan los recursos del Estado como si fueran suyos. Y mientras tanto, los ciudadanos ven cómo sus impuestos se diluyen en los bolsillos de oficiales corruptos que no parecen temerle a la justicia.
