Esta empresa creada por un grupo de comunicadores de Barranquilla, el 23 de marzo de 1991, ha contratado desde el 14 de enero del 2011 hasta el 26 de diciembre de 2016, la suma de 18 mil 567 millones 494 mil 771 pesos. Cifra record en contratación para una empresa de trabajo asociado.
Desde finales de la primera administración del alcalde Alejandro Char, se vienen denunciando las presuntas irregularidades que se han registrando con la contratación de publicidad a través de esta cooperativa.
En aquel tiempo un periodista de la ciudad denunció la firma de un sin número de contratos con montos elevados, que jamás llegaron a manos de los comunicadores y que tampoco se reflejaban, debido a la difícil situación que atravesaba el gremio en ese entonces.
Se supo que el asesor de comunicaciones del distrito, en ese entonces, Ricardo Villa, era quien, en compañía de Rita Álvarez Correa, gerente de Coopercom, maniobraba la contratación.
Álvarez Correa fue removida de su cargo como gerente de la cooperativa en días pasados, y en su reemplazo llegó el periodista Jaime Loaiza Sarabia.
De Ricardo Villa se dice, basados en hechos demostrables como en el auto en que se moviliza, la casa donde vive y los edificios que ha construído, que ha tenido un incremento de su patrimonio injustificado, sin que hasta la fecha se le investigue. Hay quienes afirman que le sirve de fachada al alcalde Alejandro Char, para seguir en el negocio inmobiliario de la ciudad. Hoy es contratista del distrito para el manejo del programa institucional de la alcaldía, por una suma que esta por el orden de los 1.500 millones de pesos anuales aproximadamente.
Según el perfil que aparece en la página web de la cooperativa, Coopercom CTA, es una empresa de la economía solidaria que brinda servicios profesionales de consultoría y asesoría a entidades y empresas de los sectores público, privado y solidario en las diferentes áreas de la comunicación social: mercadeo y venta de servicios publicitarios, organización y gestión empresarial, relaciones públicas, prensa escrita, radiodifusión, audiovisuales, comunicación en internet, fotografía y camarografía, comunicación organizacional, comunicación alternativa, periodismo en general y la dirección registrada es Cl 42 41-42 Of 102 Barranquilla, Colombia.
Un total de 86 contratos suscribió Coopercom CTA, desde el 14 de enero de 2016 hasta el 26 de diciembre de 2016, donde se destacan contratos como el firmado el 20 de diciembre de 2012, por la suma de 1.287 millones de pesos, cuyo objeto es la prestación de servicios en la producción y montaje de piezas.
También se destaca otro cuyo monto es de 1.856 millones, firmado el 30 de diciembre de 2015, el objeto, planificación y diseño de plan de medios orientados a la publicación de campañas estratégicas, del 20 de mayo al 28 de septiembre.
Hay otro por 1.237 millones de pesos, para el apoyo a la gestión en planificación y desarrollo de medios, orientados a la publicación de campañas publicitarias, firmado el 21 de enero de 2016.
Como estos hay 83 contratos más que ascienden a la suma de $18.567.494,771 pesos.
Coopercom CTA oculta información
El periodista Roberto Escorcia Bolaño, de la Cadena Radial La Liberta, en derecho de petición dirigido a las directivas de Coopercom, solicitó el listado de los periodistas y programas a quienes se les otorgó las pautas, para cumplir con el objeto de los contratos millonarios otorgados por el distrito y la ex gerente Rita Álvarez Correa, le contestó mediante misiva que ellos no estaban obligados a responderle, porque ellos eran una empresa privada.
La destituida gerente, siempre se rehusó a la entrega de los listados de periodistas para poder confrontarlos con los contratos firmados para dicho fin.
Se le olvida a las directivas de Coopercom que a pesar de que ellos son una empresa privada de economía solidaria, manejan recursos públicos de la ciudad y que por lo tanto tienen que suministrar la información debida.
Un asociado de Coopercom, que pidió reserva, manifiesta que en el año 2012 y a pesar de la contratación de 6 mil millones de pesos durante esa vigencia, a final de año, la cooperativa les envió a sus asociados una carta, donde anunciaba que no se le entregarían los bonos, porque la empresa no había producido ganancias durante ese período.
A raíz de los presuntos malos manejos al interior de la cooperativa, un grupo de asociados, decidió remover de la Gerencia a Rita Álvarez.