El pasado 23 de mayo Corrupcionaldía.com revelaba la forma descarada como la alcaldía del municipio de Soledad (Atlántico), en cabeza de Alcira Sandoval Ibáñez, argumentando la necesidad de atender a 300 ancianos en condición de vulnerabilidad, firmó un convenio interadministrativo con la Fundación Pilas Colombia Social por $4.694 millones de pesos, para operar el Centro de Vida Villa Adela, en el cual se evidencian irregularidades en su contratación, así como innegables sobrecostos.
El mismo caso se repite en el municipio de Valledupar, capital del departamento del Cesar, con el agravante de que los sobrecostos serían mayores y el operador no pone nada como contrapartida, lo que deja claro que en Colombia los programas estatales dirigidos a las comunidades más vulnerables siguen siendo apetecidos para el actuar de los corruptos.
En esta ocasión la Alcaldía de Valledupar convocó el proceso licitatorio LP-SGR-008-2024 el pasado 9 de mayo, con el objeto de «contratar los servicios básicos para la asistencia y atención integral de los adultos mayores en condición de vulnerabilidad, indigencia, desnutrición y problemas de salud en los centros de vida de Los Mayales y la Nevada del municipio de Valledupar para la vigencia 2024»
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Lo primero que llama la atención es que el contrato fue adjudicado el 30 de mayo al único proponente que se presentó a la licitación, la Fundación Vejuniz, identificada con el NIT. 824005188-8 y representada legalmente por Carmen Cecilia Gutiérrez Mattos.
No es nada casual que el director de la Fundación Vejuniz, Javier Urbina, un ganadero de la región, apoyó de manera pública la candidatura del actual alcalde Ernesto Orozco, durante la pasada contienda electoral. De hecho, le organizó encuentros con los adultos mayores que atiende con programas para ancianos, a título personal con su fundación.

Esa entidad se encargará de atender durante menos de siete meses a un total de 50 adultos mayores en los dos centros de vida, por lo que el municipio le pagará la suma de $2.185.326.669.
Es decir que según esto, la administración de Valledupar invertirá $43.706.533 en cada anciano atendido, $6.243.790 pesos mensuales. Cifra bastante generosa que probablemente le sería de mucha más utilidad si le fuera entregada a cada beneficiario, sin ningún intermediario. Hasta para mantener tres familias decentemente.
Con $208.126 pesos diarios cualquier familia viviría feliz.
Fundación sin experiencia
De otro lado, la Fundación Vejuniz solo tiene experiencia en este tipo de actividades en el municipio de Curumaní (Cesar) donde acompañó al despacho de la primera gestora social de esa población, Claudia Cardona, en programas de atención del adulto mayor durante el 2018. De hecho, la Fundación cuenta con un blog en Internet que no actualiza desde el 2012, y su cuenta de X (Twitter) solo cuenta con algunos post del 2018. Es decir que al igual que otras entidades de este tipo, son fantasmas u organizaciones de “garaje” que no cuentan ni con la infraestructura ni el músculo financiero necesarios para ejecutar contratos con el Estado, sino todo lo contrario, terminan fortaleciendo económicamente a sus propietarios con estas contrataciones.
En cuanto al presupuesto presentado por la Fundación, cotizan por ejemplo desayunos para los abuelos a $8.330 pesos, almuerzos a más de $12 mil pesos, y cenas por el mismo valor, durante supuestamente 210 días. De lo anterior podemos deducir que la fundación tendrá que invertir $339.465.000 para la alimentación de los 50 ancianos, si nos apegamos a la estricta verdad, pues no creemos que le darán a estos abuelitos desayunos de $8.000. Si acaso un huevo, dos arepas y un café con leche, que no cuesta más de $3.000.

Lo curioso, en cambio, es que a la hora de cotizar los salarios que pagarán al personal sanitario y de servicios generales que laborarán en el centro, lo hacen por 7,5 meses, es decir lo que resta del año, lo cual no se ajusta a la realidad porque el contrato prácticamente se acaba de firmar.
Adicionalmente pasan un presupuesto con paquetes de 100 servilletas a $7.245, cuando en supermercados se consiguen con precio al público por 2 mil pesos en adelante, así como paquetes de 6 marcadores a más de 16 mil pesos, cuando en el mercado se consiguen de diferentes marcas a menos de 3 mil pesos, lo que evidencia un sobrecosto en lo ofrecido por la Fundación.
Además de que afirman que entregarán 3 suéteres tipo polo en algodón a cada adulto mayor, en 8 ocasiones, es decir 3 suéteres cada 20 días, teniendo en cuenta el tiempo real del contrato, así como bermudas, camisillas en algodón y otras prendas de vestir. Mientras que la dotación para enfermeras, y demás personal se cotiza para 3 veces.
Esta inversión no sobrepasa los $20.000.000, si en realidad la realizan tal como lo estipula el contrato. Tanta belleza no existe cuando se trata de población vulnerable.
Queda claro que al igual en el municipio de Soledad, en Valledupar, gobernantes y empresarios corruptos siguen aprovechándose de las necesidades de población vulnerable para esquilmar el erario. Y sin que las autoridades de vigilancia y control hagan lo necesario para evitarlo.
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