Los hechos son claros y no son suposiciones ni “mala leche” de este medio de comunicación. Hay que reconocerlo: Buenaventura es uno del los municipios más corruptos de Colombia y la pobreza, en todos sus niveles, está ahogando a sus habitantes.
Pero llegó una gran noticia que comienza a iluminar la pesada oscuridad que cubre la esperanza perdida de los habitantes de este importante puerto marítimo.
El gobierno nacional, a la cabeza del presidente Gustavo Petro y la vicepresidenta Francia Márquez, anunció la aprobación del Plan Integral Especial para el Desarrollo de Buenaventura, que además será piloto de reparación integral para la paz.
¿En qué se traduce este anuncio y qué es realmente el Plan Especial de Desarrollo Integral para Buenaventura (PIEDB)? Veamos qué dice el portal Buenaventura 2040.
La formulación del PIEDB se establece en el contenido de la Ley 1872 del 18 de diciembre de 2017 que crea el fondo de patrimonio autónomo FONBUENAVENTURA para la financiación de los proyectos que se diseñen en el marco del plan de desarrollo social especial para Buenaventura.
El artículo 3 de la Ley 1872 de 2017 que se cita establece que éste fondo tiene por objeto:
“Promover el desarrollo integral del Distrito de Buenaventura, a través de la financiación o la inversión en proyectos que atiendan las necesidades más urgentes del Distrito y, principalmente, la financiación de un Plan Especial de Desarrollo Integral, con inversiones a 10 años, orientadas a convertir al Distrito Especial en un territorio en el que se garanticen plenamente condiciones de bienestar y progreso en materia social, económica, institucional y ambiental para sus pobladores urbanos y rurales”.
Se resalta la financiación o la inversión en proyectos. Sí, es mucho dinero lo que se necesita para convertir a Buenaventura en un territorio donde se garanticen plenamente condiciones de bienestar y progreso.
Por un lado, ese anuncio debe estar revoloteando en el imaginario de los líderes políticos de Buenaventura como una nueva oportunidad para aumentar sus arcas personales y manejar recursos públicos que les dé poder y riqueza.
Por otro lado, el anuncio del gobierno vuelve a encender la esperanza del las diferentes comunidades bonaverenses sometidas por esos políticos depredadores y mafiosos, a quienes eligen y admiran a ciegas.
Es un gran anuncio, un salvavidas para este distrito apabullado por la corrupción, pero ¿quién y cómo se van a manejar estos recursos? Los bonaverenses tienen un gran reto con este salvavidas y no dilapidarlo como han hecho con todos los recursos que por años han llegado a este municipio.
A pesar de ese estigma de mediocridad en la gestión pública, la comunidad de Buenaventura tiene hombres y mujeres honradas y preparadas para rescatar el sentido de lo público, la importancia del bienestar general y de la sacralidad de los recursos públicos.
Por ello exhortamos a esta comunidad a incluir en este PIEDB la implementación de un Plan Anticorrupción (educativo y operativo) que fomente la cultura del buen gobierno y el respeto por el bien común.
Este Plan Anticorrupción debe conducir, en un plazo de dos años, a considerar a Buenaventura como “Zona Libre de Corrupción”. Estaremos atentos, para ese entonces, instalar esa placa en la puerta de la alcaldía distrital.
Sino no es así, seguramente vamos a perder el tiempo y todo el dinero que se va a invertir en el PIEDB.
Igualmente es imprenscindible la modernización y ajuste de sus finanzas, rescatar el pago predial que se niega a pagar la concesión portuaria del puerto de Buenaventura y terminar de gestionar el acuerdo de reestructuración de pasivos.