En Colombia, la creatividad para robar no tiene límites. Ahora, el escenario es el sistema de salud, y el guion es tan retorcido que parecería ficción. El departamento del Atlántico se ha convertido en el centro de un fraude masivo donde Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) fantasmas facturan millones por accidentes de tránsito que nunca ocurrieron. Sí, leyó bien: clínicas sin paredes ni personal que “atienden” pacientes inexistentes.
IPS fantasmas facturan millones sin tener ni una pared
La Administradora de los Recursos del Sistema de Salud (ADRES) destapó la olla podrida: 52 IPS fraudulentas que, sin tener siquiera una sede física, han facturado millones de pesos por servicios de salud y gastos de transporte de urgencias derivadas de accidentes de tránsito de vehículos sin SOAT. Un desfalco descarado que muestra el nivel al que ha llegado la corrupción en el país.
Atlántico y Magdalena: los reyes del engaño
De estas 52 IPS fantasma, 36 están ubicadas en los departamentos de Atlántico y Magdalena. En Soledad, municipio con una tristemente célebre reputación por prácticas corruptas, se concentran 14 de estas “instituciones”. Malambo aporta 9 más, y Barranquilla, la capital, no se queda atrás con 3 IPS inexistentes. Parece que en el Caribe colombiano la corrupción es el pan de cada día.
Soledad: cuando la corrupción es tradición
Es alarmante cómo Soledad se lleva el premio en esta competencia delictiva. Un municipio donde la corrupción parece ser parte del paisaje y donde las IPS fantasmas florecen como maleza. ¿Hasta cuándo seguiremos permitiendo que estos saqueadores jueguen con la salud y el dinero de los colombianos?
ADRES toma medidas: ¿Parche o solución?
Ante este escándalo, la ADRES decidió suspender de inmediato los giros a estos 52 prestadores hasta verificar su existencia real. Además, remitirá el caso a la Fiscalía General de la Nación. Pero la pregunta es: ¿Será suficiente para frenar esta ola de corrupción o solo estamos poniendo un curita en una herida que requiere cirugía mayor?
Un sistema de salud saqueado: el 40% de las reclamaciones son fraude
Según estimaciones de la ADRES, de los $500.000 millones que gira anualmente por reclamaciones, se cree que el 40% son fraudes. Es decir, $200.000 millones al año van directo a los bolsillos de estos delincuentes de cuello blanco, mientras la gente de a pie sigue sufriendo por un sistema de salud colapsado.
Motocicletas sin SOAT: el caldo de cultivo perfecto
Con un parque automotor de casi 19 millones de vehículos, de los cuales 11,5 millones son motocicletas y solo el 39% de ellas cuenta con SOAT vigente, el terreno está abonado para estos fraudes. Las motos participan en el 88% de las víctimas de accidentes de tránsito, lo que facilita a los estafadores justificar reclamaciones falsas.
¿Y las autoridades qué?
El director de la ADRES, Félix León Martínez, señala que se estima que el 40% de las reclamaciones son fraudulentas. Sin embargo, uno no puede evitar preguntarse: ¿Dónde estaban las autoridades mientras se montaba este carnaval de corrupción? Es hora de que se tomen medidas drásticas y se ponga fin a esta burla al sistema y a los ciudadanos.