Por: Jorge Vergara Carbó
Indudablemente es una buena noticia, mas no excelente, pues con esa movida tenemos que tragarnos unos sapos enormes que no auguran transparencia ni buen manejo de la empresa de servicios públicos de Barranquilla. Vamos a explicar por qué.
Aprovechando la visita del Rey de España (suena como si regresáramos en el tiempo, al siglo XVIII o XIX) en la capital del Atlántico, el presidente Iván Duque se presentó con dos “regalos” para Barranquilla: uno, el compromiso de terminar la carretea Barranquilla-Cartagena y la Vía de la Prosperidad, y dos, el más importante, haber presionado a la SAE para que negociara el 82.16% de las acciones que tenía en cautiverio de INASSA, de acuerdo a lo establecido en la Ley 1708, que en uno de sus artículos permite la venta anticipada de los bienes que se encuentran en proceso de extinción de dominio, para que pasen a manos del Distrito.
Con la firma del acuerdo entre el Distrito y a dirección de la SAE, se dio por finalizada la etapa de negociación que se venía desarrollando entre la entidad territorial con su equipo de trabajo y la SAE.
La negociación acordada contempla el traspaso de las acciones de Inassa (82.16%), a la empresa de economía mixta Alumbrado Público de Barranquilla SAS (APBAQ), en la cual el Distrito tiene el 65%, de las acciones. He aquí el sapo que tenemos que tragarnos: ¿por qué el distrito de Barranquilla no se quedó solo con esas acciones? ¿Por que tenía que meter a unos privados y perder la oportunidad de que la empresa regrese en su casi totalidad a manos de los barranquilleros?
Esta negociación no implica pago alguno para el Distrito, lo que no afecta su presupuesto anual de ingresos y gastos y además mantiene el pago de regalías por parte de la Triple A, en un 30%, del flujo de caja libre cifra que en el año 2020 fue de $34.459 millones, y que posiblemente este año sea del orden de $37.215 millones.
Un excelente regalo nos dio antes de la fiesta de velitas, el alcalde Jaime Pinarejo con su equipo financiero al poder darle cumplimiento al sueño de los barranquilleros y atlanticenses de recuperar el poder accionario de nuestra querida y amada empresa Triple A, insignia de Barranquilla y el Atlántico.
La negociación de las acciones de la SAE, se hizo directamente con la empresa de economía mixta Alumbrado Público de Barranquilla SAS APBAQ, en la cual el Distrito tiene el 65%, de las acciones y varios socios privados el 35%.
Estos socios privados conformaron la Unión Temporal Barranquilla Capital de Luz SAS, empresa que fue la ganadora en el año 2017, de la prestación del servicio a de alumbrado público.
Los socios privados que conformaron la sociedad Barranquilla Capital de Luz SAS son los siguientes: Eléctricas de Medellín Ingeniería y Servicios SAS tiene el 50% de las acciones, Alutrafic Led con el 20%, Megaproyectos de iluminación Colombia con el 17%, Iluminaciones Villavicencio con el 10%, y Celsa SAS que tiene el 3%. Ellos operan el alumbrado público de Barranquilla, cuyo impuesto lo recauda la empresa AIR-e y sus recursos se manejan a través de una firma Fiduciaria para tal fin.
¿De dónde saldrán los $560.000 millones para pagarle a la SAE el 82.16% de estas acciones?
Los recursos para la compra de las acciones de la SAE, la pondrán los cinco (5) socios privados de Barranquilla Capital de Luz SAS, señalados anteriormente y que hacen parte de la empresa Alumbrado Público de Barranquilla SAS (APBAQ), de dos formas: un primer pago en efectivo del 50%, del valor negociado en un año, cuyo valor es de $280.000 millones, que conseguirán a través del sistema financiero y el resto con base a las utilidades futuras que genere la Triple A.
Para evaluar la empresa, tanto la SAE como APBAQ, contrataron una banca de inversión para que calcularan cada una por su lado el precio de las acciones que poseía la SAE, en la Triple A. Una vez fijado el precio de la acción, los privados con el Distrito aceptaron pagar por cada acción, la suma de $9.275, que al multiplicarlo por el número de acciones 60.4 millones, arroja esa operación un valor de $560.000 millones.
Lo que no sabemos es para dónde van esos $560.000 millones, a manos de quién van a parar.
Y, ¡oh sorpresa! Aquí viene el sapo que nos tenemos que tragar: la firma que posee el 50%, en Barranquilla Capital de Luz SAS pertenece al ingeniero William Vélez (https://corrupcionaldia.com/los-supercontratistas-de-colombia-el-meteorico-ascenso-empresarial-de-william-velez/), quién creemos a su vez es el dueño de Iluminaciones Villavicencio, y otras empresas de servicios públicos domiciliarios.

William Vélez ha tenido y sigue teniendo vínculos contractuales con la Triple A, en el servicio de aseo. Servicio que el gerente Guillermo Peña logró, durante su gestión, que gran parte del mismo lo prestara directamente la empresa Triple A, que hoy cuenta con equipos modernos de recolección de basuras. Servicio que los barranquilleros, esperan que sigan manejado directamente por la Triple A.
El otro socio importante es Alutrafic Led (20%), que suministra las luminarias para el alumbrado público y por supuesto su experiencia administrativa y financiero
El tal regalo del presidente Iván Duque no es para los barranquilleros, quienes tienen derecho sobre la totalidad de esas acciones —que entre otras cosas le fueron arrebatadas con triquiñuelas y engaños—, el regalo fue para William Vélez y los otros privados socios de Barranquilla Capital de Luz SAS.
Para entender porque la Triple A, es la “joya de la Corona” señalaremos los aspectos más importantes de su información financiera.
ESTADO DE PERDIDAS Y GANACIAS 2021
VENTAS | $677.791 |
GASTOS OPERACIONALES | $520.466 |
UTILIDAD OPERACIONAL | $157.235 |
OTROS GASTOS | $62.418 |
UTILIDAD NETA | $94.817 |
EBITDA | $221.724 |
BALANCE GENERAL DICIEMBRE 31 DE 2020
ACTIVOS | $850.548 |
PATRIMONIO | $375.280 |
PASIVOS | $475.268 |
CUENTAS X COBRAR | $109.116 |
UTILIDAD ACUMULADA | $115.505 |
CAPITAL | $73.485 |
Lo interesante de la Triple A, es que a pesar de los actos de corrupción cometidos al interior de la empresa, nunca ha dejado de dar utilidades. Utilidades que hoy se incrementan al no tener que pagar el 4.5%, sobre los ingresos brutos, que se le reconocía a los españoles, lo que motivo por parte de la FGN, decretar la extinción de dominio, proceso que está en curso, al igual que las demandas impetradas por la PGN y el Distrito.
Estos procesos en nada afectan la negociación realizada entre la SAE y APBAQ, ya que en el evento de que se falle a favor de Inassa, la que responde es la SAE, y de salir a favor, el beneficiado en parte es el Distrito a quién tendrán que devolverle la plata que cobraron por la “Asesoría Técnica” que nunca prestaron suma cercana a los US$80 millones.
¿ES LA TRIPLE A UN BUEN NEGOCIO?
De acuerdo a los resultados del balance de los últimos años, la Triple A ha venido arrojando utilidades, las que se han incrementado por el buen manejo que le diera la SAE y por supuesto al dejarse de pagar el 4.5%, de las ventas por concepto de asesoría técnica.
La utilidad del 2020, fue de $94.817 millones. Su endeudamiento financiero es del 19.37, de los ingresos. Le presta servicios a 572.376 clientes, en 15 entidades territoriales.
Su recaudo que era antes de la pandemia del 88%, por el virus bajo al 78% ,(531.830/677.791). Su planta de personal es de 1.736 trabajadores, de los cuales tan solo el 16%, son mujeres, y genera empleos indirectos aproximadamente de 2.703. Su planta de personal se incrementó en el año 2020, en alrededor de 400 personas, al asumir la Triple A, directamente el servicio de aseo..
La empresa pagó a proveedores $372.979 millones, al Distrito por concepto de Regalías $35.459 millones, equivalente al 5%, de las ventas; pagó a la DIAN $61.086 e invirtió en infraestructura $156.731 millones. Tiene una cobertura del 100%, y su índice de pérdidas de agua es del 17.4%, por usuario.
Todo lo anterior en un año de pandemia, lo que indica la solidez financiera de la empresa, y el buen manejo que le diera Guillermo Peña Bernal como gerente, quién indudablemente con su gestión la empresa mejoró ostensiblemente y esperamos continúe por esa senda con los nuevos propietarios.
INFORMACIÓN FINANCIERA A JUNIO DE 2021
De acuerdo al Tablero de Control Operacional de la Triple a, a junio de 2021, destacamos los siguientes datos :
INGRESOS | $389.626 |
RECAUDO | $308.940 |
% DE RECAUDO | 79 |
EBITDA | $154.024 |
INVERSIÓN | $20.376 |
INDICE DE PÉRDIDA DE AGUA | 17.22% |
Es probable que las ventas en el 2021, sean superiores a la del 2020, en un 15%, lo que significaría unas ventas totales para el presente año de $779.460 millones, y sus utilidades crezcan en un 10%, llegando a $104.299 millones, y las regalías que reciba el Distrito sean de $38.973 millones.
Desde el punto de vista técnico la empresa debe centrar su esfuerzo en disminuir la fuga de agua en la operación y por supuesto las del robo de agua, por adulteración de los medidores y por conexiones fraudulentas. De bajarse al 10%, ese índice las utilidades de la empresa se incrementarían en un % por encima de ese 10%. Este problema es a nivel nacional, ya que la mayoría de las empresas pierden el 50% o más del agua tratada.
Las utilidades pueden aumentar mejorando el nivel de recaudo que tenían antes del 88%, y por supuesto reduciendo una serie de gastos que podrían estar afectando las utilidades, sin que ello implique desmejorar la prestación del servicio.
Qué esperamos del manejo de los nuevos dueños
Lo que uno espera es que la empresa se maneje con criterio empresarial, es decir que genere utilidades y preste un servicio a un costo más bajo de lo que pagamos hoy. No pueden cometer los errores del pasado.
Creemos que APBAQ, una vez legalizado el negocio, mediante escritura pública y registro en la Cámara de Comercio debe convocar una asamblea de accionistas, para designar una nueva junta directiva, que responda al porcentaje de cada uno de los socios.
Creemos que en esa junta directiva debe tener asiento la gobernación del Atlántico, como representante de 14 municipios, distintos al Distrito. Igualmente el Distrito con dos casillas, y los socios privados mayoritarios una casilla y darle representación de acuerdo a la Ley a los accionistas privados minoritarios (3.34%).
Creemos que quienes integren la junta directiva sean personas con alto conocimiento del sector y experiencia en el manejo administrativo y financiero de empresas. Una buena junta directiva es prenda de garantía para cualquier tipo de empresas.
Una vez definida su junta directiva, proceder a escoger un gerente que cumpla la Misión y Visión de la empresa contemplados en sus estatutos, los cuales también pueden ser modificados en la Asamblea de Accionistas, si los nuevos propietarios lo consideran prudente.
Creemos que el personal actual de la Triple A como su Sindicato están comprometidos con los objetivos de la empresa, ellos han sido vital para los logros alcanzados hasta el momento. Pensamos que el comunicado sacado por el sindicato respaldando la negociación y pidiendo estabilidad para su personal, fue oportuno. Ya que motivo a que el alcalde Jaime Pumarejo le diera un parte de tranquilidad a los trabajadores de la Triple A, lo que puede garantizar estabilidad laboral.
Finalmente tienen un problema que resolver con el municipio de Soledad, ya que el 18 de diciembre se vence la concesión, y hay voces en ese municipio que piensan erróneamente que lo mejor para ellos es buscar un nuevo operador, y exigirle a la Triple A, que les devuelva su planta de tratamiento según lo firmado en el contrato de concesión.
Independiente de las conjeturas alrededor del negocio, la realidad es que el alcalde Jaime Pumarejo, logro cumplir con uno de sus compromisos de regresarle la Triple A, a los barranquilleros y cumplió.
ESTAREMOS VIGILANTES SOBRE EL DESEMPEÑO DE LA TRIPLE A