Cuando los buenos abandonan la política, los canallas toman el control. En Colombia, esta realidad cobra vida en los pasillos de la Corte Suprema, donde se destapan los turbios detalles del escándalo de corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). ¿Los protagonistas? Políticos, millones en efectivo, y los conductores que llevaron más que pasajeros.

Un escándalo de maletas y millones

La investigación apunta directamente a figuras destacadas como Iván Name, exsenador de Alianza Verde, y Andrés Calle, exrepresentante del partido Liberal. Según Pedro José Castro, supuesto prestamista, $4.000 millones de pesos fueron entregados a Sneyder Pinilla, exsubdirector de manejo de desastres de la UNGRD, para pagar sobornos. Ahora, los conductores de los implicados están en el ojo del huracán.

El conductor de Ortiz: un testimonio crucial

Este 24 de enero, Orlando Marín Páez, miembro del esquema de seguridad de Sandra Ortiz, declaró ante la Corte Suprema. Según su testimonio, llevó a Ortiz al apartamento de Iván Name en octubre de 2023, coincidencias respaldadas por chats y registros de celdas telefónicas. Ortiz afirma que esas reuniones eran parte de la agenda gubernamental, pero los informes sugieren que se trataba de coordinar sobornos.

Sandra Ortiz, exconsejera para las regiones.

Marín también reveló que el apartamento pertenecería a Name, confirmación obtenida al escuchar al personal de seguridad mencionarlo.

Escoltas y redes de confianza

Otros dos escoltas de Ortiz, Víctor Cárdenas y Omeye Yalid Castellanos, declararán el 29 de enero. Castellanos, una figura cercana a Ortiz, también trabajó en la Unidad de Trabajo Legislativo y tuvo contratos con la gobernación de Boyacá bajo la coalición Verde-Liberal. Esta red de confianza parece haber facilitado operaciones cuestionables.

Este es Omeye Yalid Castellanos Castellanos, exmiembro del esquema de seguridad de Sandra Ortiz.

Testigos y pruebas contundentes

El 31 de enero, será el turno de Diego Sierra, conductor de Sneyder Pinilla, quien supuestamente compró una maleta para transportar $1.500 millones de pesos destinados a Name. Miguel Darío Ángel Bejarano, conductor de Olmedo López, también comparecerá. Registros muestran que transportó maletas desde la UNGRD hasta Residencias Tequendama, donde supuestamente se organizaban las entregas.

Olmedo Lopes y Sneyder Pinilla

Sobornos disfrazados de agendas

Las planillas de viajes firmadas por Bejarano revelan destinos clave como el Ministerio de Hacienda y Residencias Tequendama. Mientras Ortiz asegura que se trataba de reuniones gubernamentales, los fiscales insisten en que estos viajes eran parte del esquema de sobornos.

Reflexión final

La corrupción en la UNGRD pone en evidencia cómo los malos manejos políticos se entrelazan con la indiferencia ciudadana. La sociedad paga el precio cuando los buenos se abstienen de actuar. Es hora de exigir responsabilidad y no dejar que los malvados sigan manejando el volante.


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